martes, 26 de enero de 2010

Tess, la de los D'Uberville

La novela nos cuenta la historia de Tess, una chica de 16 años, que por un episodio de destino (su padre, un campesino pobre, descubre que sus antepasados eran nobles) y la mala cabeza de sus progenitores, ve como su vida cambia para mal. Un embarazo no deseado siendo virgen, un bebé que enferma y muere, y una sucesión de desgracias que la marcarán hasta la muerte. Los convencionalismos sociales del XIX, pero sobre todo la culpabilidad que la atormenta, harán imposible que Tess se salve, que escape a su destino. Pese al rol de la mujer decimonónica que la situa en un segundo plano, el determinismo en el libro es tan abrumador, el sentimiento de culpabilidad tan poderoso cuando realmente Tess es una víctima y la autoestima de la protagonista inexistente, que la liberación sólo puede llegar a través de la peor forma posible. Realmente me costó simpatizar con Tess y su conformismo y resignación. Me fue difícil entender su comportamiento.
Thomas Hardy, coetáneo de Virginia Woolf, vivió en plena época victoriana y fue acusado de pesimista en sus novelas. Desde luego esta no es lo que se dice alegre. Son interesantes las descripciones del campo inglés y de las tareas de los campesinos con las aplicaciones de la máquina de vapor salida de la revolución industrial o las contraposiciones fe/ateísmo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Na Virginia Woolf qué era na nicole ex-d'en tom sonrisa cruise... amb un nas postis aferrat i cara de pomes agres?... a sa peli aquella de la mort en preves...q és deia las olas (q no serien ses olas del camp nou del 2009)
En fi, et full fer arribar un clam popular, aquí s'afició de l'azar subjetivo... està esperant la teva entrada sobre el millenium de'n Larson... fins quan haurem d'esperar-nos?

n de nassot fals